Yo estaba vestido de Habanero
Tú dijiste adiós con la mirada
Mientras que sonaba un tan Romeo
En un balcón de la vieja Habana
Tú dijiste adiós con la mirada
Mientras que sonaba un tan Romeo
En un balcón de la vieja Habana
No hay nada más perro que el amor
Porque muerde siempre antes que ladra
Me latió tan fuerte el corazón
Me dijiste "ven" desde la barra
Porque muerde siempre antes que ladra
Me latió tan fuerte el corazón
Me dijiste "ven" desde la barra
Y yo te dije "niña te invito un mojito"
Tú me dejaste clarito que la cosa no iba así (oye la cosa no va así)
Y fue entonces cuando le pedí a la virgen
De la caridad del pobre que intercediera por mí (ay que intercediera por mi)
De repente, tú cambiaste de semblante
Me empezaste a ver galante, yo te dije "eres mi atril"
Fuimos sólo dos extraños y han pasado ya diez años
Tú me dejaste clarito que la cosa no iba así (oye la cosa no va así)
Y fue entonces cuando le pedí a la virgen
De la caridad del pobre que intercediera por mí (ay que intercediera por mi)
De repente, tú cambiaste de semblante
Me empezaste a ver galante, yo te dije "eres mi atril"
Fuimos sólo dos extraños y han pasado ya diez años
Mi amor propio se quedó en los huesos
Que pinga contigo, me dijiste
Dejó de sonar el tal Romeo
Le llegó el turno a Silvio Rodríguez
Y a lomos de un unicornio azul
Te perdiste por el malecón
Yo me hice la señal de la cruz
Tú no me dejaste otra elección
Que pinga contigo, me dijiste
Dejó de sonar el tal Romeo
Le llegó el turno a Silvio Rodríguez
Y a lomos de un unicornio azul
Te perdiste por el malecón
Yo me hice la señal de la cruz
Tú no me dejaste otra elección
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